miércoles, 18 de abril de 2007

FOTOS: Bautismo de familia Illescas



Luis Enrique Illescas se bautizó conjuntamente con su esposa Rosa María y sus hijos adolescentes: Kathy y Giancarlo. Luis Enrique conoció al Señor en el año 1976, pero recién se bautizó luego de reconciliarse con el Señor después de 30 años. La Gloria sea para nuestro Dios.

FOTOS: Bautismos de César y Segundo


Aprovechando el retiro de Semana Santa, se bautizaron seis hermanos en la piscina del campamento de Aucallama. En la foto observamos al joven abogado César Velarde (antes y después) y al hermano Segundo Navarro.

jueves, 12 de abril de 2007

HISTORIA: El Bosque, congregación hermana

La principal congregación hermana de la iglesia del Callao, fue siempre la Iglesia Bíblica Bautista del Bosque que inició su ministerio en la Calle Catorce y luego en la Calle Cinco de la urbanización La Florida, en el distrito del Rímac. Esta iglesia que actualmente tiene su templo en la Av. Amancaes 700 en el mismo distrito, tuvo como pionero de la obra al misionero estadounidense Rudy Johnson, gran amigo de Clarencio Burnette Taylor, fundador de la obra en el Callao.

Cuando se formalizó la iglesia del Bosque en 1961, la misionera miss Pat tocaba el acordeón y el órgano, y la primera persona que llegó al conocimiento de Cristo fue la adolescente Gloria Tarazona Córdova, quien llevó a la iglesia a su mamá Perla Córdova Ramírez (Flora Felipa, su verdadero nombre) y hermanos: Eduardo, Elsa y Lissette, primos del entonces niño César Sánchez Martínez, quien también acudió a esa iglesia entre los años 1963 y 1964. Perla Córdova fue esposa del fallecido Eduardo Tarazona Cómena, hermano mayor de Fausto Conrado Tarazona Cómena, casado en segunda nupcias con Susana Rojas Vda. de Canto. Fausto Conrado Tarazona fue durante muchos años diácono en la iglesia del Callao y su esposa Susana, fue la madre de Yolanda Canto Rojas, esposa de Marco Pizán, padres de Marco Polo Pizán Canto, esposo de Rut Vega Espejo.

Por el ministerio de la hermana Perla Tarazona, llegó a la iglesia del Bosque la familia Arce Muñoz, integrada por doña Juanita Muñoz de Arce (hermana del pastor Federico Muñoz, quien fuera pastor durante muchos años de la IEP, templo “Maranatha”) y sus hijos Carlos, Freddy, José, María y Mirian. María es la esposa de Pedro Vílchez Malpica, excongresista de la República y pastor de la Iglesia Bíblica Bautista de Zárate, mientras que Mirian está casada con Leoncio Pinedo, quien fuera miembro de la iglesia del Callao.

Desde sus orígenes, la “competencia” entendida en el buen sentido de la palabra fue siempre entre las iglesias del Callao y el Bosque. Los niños competían por aprender de memoria los nombres de los libros de la Biblia, mientras que los jóvenes lo hacían en los concursos bíblicos, deportes y música especial. También se competía por la asistencia. Los primeros años fueron favorables para la iglesia del Callao, no obstante tener un año menos de fundada, pero con el transcurrir del tiempo, el Bosque logró ejercer su hegemonía cuando superaba los 500 asistentes, número que los ha duplicado en la actualidad.

También eran frecuentes, los congresos y convenciones. Cuando en 1969 se terminó la construcción del templo del Bosque, esta congregación albergaba anualmente a todas sus iglesias satélites, mientras que el Callao optaba por hacer lo propio en sus instalaciones. Sin embargo, la organización de la Iglesia del Bosque fue más centralista, mientras que la iglesia del Callao se orientó hacia la descentralización de las iglesias bautistas independientes en todo el país, mediante la asociatividad y comunión libre de las congregaciones. El Bosque formó su Instituto Bíblico Bautista en Chillón para la preparación de sus obreros, mientras que el misionero Taylor, fundó en 1972, el Seminario Bautista de Lima (hoy Seminario Bautista del Perú) en la iglesia del Callao para luego trasladarse a la iglesia de Tahuantinsuyo y obtener luego su local propio en Trujillo, respectivamente.

© 2006 Status Global SAC.

lunes, 9 de abril de 2007

HISTORIA: Los especiales de oración.

- ¿Su pedido hermano Núñez?
- Un especial pastor.
- Pastor, yo también quiero un especial.
- Gracias hermana Susana. Su especial está anotado.
- El hermano Manay levantó la mano primero.
- Gracias. Buenas noches hermanos. Pido un especial para mí, y otro especial para mi esposa.

Estas eran algunas frases que se escuchaban en las noches de oración. ¡Se solicitaban hasta más de 15 pedidos especiales de oración! ¿Pero, qué eran esos pedidos? Eran motivos de oración que algunos creyentes consideraban estratégicamente no mencionarlos en la reunión de oración de los días miércoles. Es decir, un “especial” podría significar un nuevo empleo para un hermano, el aumento de sueldo solicitado al jefe, la declaración amorosa de un joven a una señorita, o simplemente una enfermedad que sufría algún miembro de la iglesia. Se ignora cuándo la iglesia adoptó esa costumbre. A finales de 1973, cuando inició su ministerio el pastor Rodolfo García Saavedra, esa costumbre era algo más que un hábito en la congregación, pero era ley, si la solicitud la hacía un diácono u oficial de la iglesia.

En esos años, la iglesia no era conciente que un pedido de oración debía ser específico para que los hermanos puedan orar por algo más definido. Tampoco era malo ante los ojos de quienes lo practicaban. Muchos, por no decir la mayor parte de los miembros, hacían su pedido de “especiales” con muy buena disposición y sinceridad de corazón. Con el tiempo, se aprendió que un pedido de oración tiene otras connotaciones que involucra a toda la congregación.
No pretendemos criticar el apoyo en oración en las necesidades de los creyentes, sino observar la forma cómo se hacía. Por cierto que los ministerios García y Amico respectivamente, se encargaron de hacer las correcciones necesarias.
Sin embargo, la iglesia debe aprender también de sus costumbres y errores. Un “especial” significaba para los años 70, una forma de solicitar el apoyo de oración en algo que no se podía compartir públicamente. Tal vez, la iglesia no sabía compartir sus necesidades como manda la Biblia. Ahora ya no hay “especiales” porque hemos aprendido lecciones basadas en la confianza y amor de los hermanos, y ella no es tanto si se dice públicamente o no.

© 2006 Status Global Corporation.

FOTO: En pleno culto de adoración.

Esta foto corresponde a diciembre de 2005. En la primera banca están de derecha a izquierda: Consuelo Vera (prima de María Elena Quintana), Darío Pérez, su esposa Rebeca y María Elena Quintana con su sobrinos. Sigue NicoI, Brenda Campos (hija de Violeta Amico) y Naith Carpio (de pie). En la segunda banca se ubica a la hermana Risso y Andrés Amico. En la tercera banca están: Ana Contreras Vda. de Amico (mamá del pastor Oswaldo), la hermana Estrella y la hermana brasileña Giuldinait de Gonzales.

martes, 3 de abril de 2007

FOTO: Los jóvenes de antaño.

Alejandrina Alvarez de Barreto. La señorita aún estaba en el colegio y era muy colaboradora con la entonces Sociedad de Jóvenes. Era el año 1976.


Samuel Vega Espejo. Este adolescente de 1975 aún estudiaba en la Gran Unidad Escolar "Bartolomé Herrera". Era un muchacho muy tranquilo (cuando dormía, por supuesto). Estaba en la clase de los intermedios.

Bernabé Vega Espejo. Asiduo integrante de la Sociedad de Jóvenes. Aún estaba en el colegio y jugaba básquet. Este jovencito se convirtió el 28 de julio de 1976 en la Iglesia Bautista Central de Tahuantinsuyo.

Oswaldo Amico C. Fue presidente de la Sociedad de Jóvenes en 1975. Estudiaba Ciencias de la Comunicación en la Universidad de Lima, pero Dios tenía otros planes para él.

HISTORIA: La visitación de los viernes

Los días de visitas eran los viernes. Ese día, los creyentes llegaban a las 7 de la noche y el pastor Rodolfo García los esperaba con un programa de visitas. Este ministerio fue organizado por el Reverendo García a principios de 1974, él había tomado el pastorado a finales de 1973 y era aún soltero.
Inicialmente, él mismo presidía el ministerio, pero a mediados de su primer año de trabajo, tomó la posta el hermano Julio Serruto, entonces diácono de la iglesia y maestro de adultos en la Escuela Dominical. Entre los habituales hermanos que participaban en este ministerio estaban Manuel Odicio Egoavil y su hermana Gladis, quien entonces terminaba la secundaria en el colegio General Prado de Bellavista. También la hermana Leonor Amasifuén de Quilcat, quien ahora duerme en el Señor, era una entusiasta colaboradora conjuntamente con su hija Rosa Amelia Quilcat (residente en Venezuela) y Luz María García. También participaba el entonces seminarista y estudiante de psicología en la Universidad Nacional “Federico Villarreal”, Arxaphad Braithwaite Carlín, su mamá María Carlín y sus hermanas Miroslava y Elizabeth.
Asimismo, participaba del ministerio Leonardo Barreto Guerrero, quien tenía una sastrería al costado del colegio José Olaya de La Perla y las hermanas Bertha Benites de Paiva y Ofelia Chávez de Núñez, quienes ya tenían varios años de membresía en la iglesia, especialmente la última considerada como la primera familia que llegó a la iglesia cuando estaba en el Jr. Vigil en el Callao bajo la conducción del misionero Clarencio Burnette Taylor.
Entre los jóvenes, estaban Esmerler Urbina, Félix Paiva Benites y César Sánchez Martínez, quien había llegado en febrero de ese año procedente de la Iglesia Bíblica Bautista de La Pascana, en el distrito de Comas, pero como hemos descrito en anteriores capítulos, él estuvo por primera vez en el local de la iglesia en 1963 cuando se celebró un Congreso de Iglesias Bautistas, representando a la Iglesia Bíblica Bautista del Bosque.
Otros entusiastas colaboradores del ministerio de visitación eran los esposos César Martínez y Juana Espino, así como el diácono Marcelo Aranda Pérez, su esposa Elea Villanueva de Aranda y sus hijas Mariela y Miryam, la primera concluía sus estudios de educación en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, mientras que Miryam cursaba aún el cuarto año de secundaria. También hubo otros hermanos que participaban de vez en cuando en este ministerio, pero no eran asiduos colaboradores.
¿Cómo se visitaba? De acuerdo al programa establecido con antelación, los hermanos salían de dos en dos, pero uno de ellos era quien fungía de líder. Generalmente era el hermano con mayor experiencia en la visitación. Se tomaban las calles de los alrededores y se entregaban folletos, solicitándoles unos cinco minutos para compartir La Palabra. Para el autor del libro, fueron las experiencias más gratas de su vida. Dios usaba la vida de los creyentes y varias personas llegaban a conocer a Cristo bajo este ministerio. Precisamente fue la forma cómo Dios usó este ministerio para involucrar a la familia Vega Espejo a la iglesia. El instrumento del Señor fue el diácono Marcelo Aranda, quien acompañado del autor, tocó la puerta del Jr. Piura 210 en la Urbanización Alta Mar para invitar a sus moradores asistir a la iglesia. En esa casa habita hasta la fecha, la familia Vega Espejo.

© Status Global Corporation.

lunes, 2 de abril de 2007

FOTO: Ana Paula Quintana y Rebeca Pérez Vega

Los niños serán siempre la siguiente generación de creyentes en nuestra iglesia. En la foto observamos a Ana Paula Quintana (hija de "Taito") y Rebeca Pérez Vega (hija de Darío Pérez y Rebeca Vega).

FOTO: Olinda y Oswaldo Amico

Los esposos Olinda y Oswaldo Amico reciben presente de la congregación por motivo del onomástico de la esposa del pastor, el 1 de enero de 2006. En la foto, la hermana Olinda se prueba un sombrero de verano.